miércoles, 21 de diciembre de 2011

David Lych, meditación entre tinieblas (II)

"Existe un campo que nos une a todos. Siempre ha estado allí. Es ilimitado infinito y eterno. Es ese nivel de vida que nunca tuvo un comienzo. Es y será para siempre. Y puede ser alentado".



El proyecto al que el director ha dedicado más tiempo y esfuerzo en los últimos años no está relacionado directamente con el arte, sino con la meditación. En 2005 creó la Fundación David Lynch para la Educación Basada en la Conciencia y la Paz Mundial, cuyo objetivo es difundir la práctica de la Meditación Trascendental en todo el mundo, especialmente entre los escolares, uno de los sectores de población más sensibles a la ansiedad y la depresión. La Meditación Trascendental es una forma de meditación que debe ser practicada en dos sesiones al día de 20 minutos cada una de ellas. Su propósito es el de aquietar la mente y  conectar con el yo más profundo y más "trascendental". El movimiento de la MT fue creado a mediados de los años 50 por el Maharishi Mahesh Yogui, un religioso nacido en la India en 1918 cuya idea era poder difundir la técnica al máximo de personas posible y que esto a su vez favoreciera la consecución de la paz mundial. Desde entonces ha ido creciendo de forma colosal. Paralelamente a su éxito también ha cosechado críticas, muchas de ellos justificadas. Algunos episodios protagonizados por el Maharishi, el abusivo precio que se cobra a los principiantes y el funcionamiento de la organización -con ticks más propios de una multinacional como la Coca-cola que de un movimiento espiritual- no han pasado desapercibidos. Un ejemplo de ello es la forma casi dogmática con la maestros y seguidores se refieren a la técnica del Maharishi, como si dentro de la extraordinariamente variada y fecunda técnicas de meditación basadas en los Upanishad y en el Bhagavad-Gita la suya fuera la única realmente efectiva.

 El director explicando su experiencia con la MT:



  
Estas sombras no deben no obstante tapar el valioso trabajo que ha llevado a cabo la MT por todo el mundo. El hecho de ser una técnica muy concreta y fácil de aprender ha ayudado a su difusión e implantación en escuelas, hospitales y centros sociales. El mundo es sin duda un lugar mejor si cada día más y más personas de todas las culturas, religiones y razas se animan a practicar éste o cualquier otro tipo de meditación. Lograr por ejemplo que en una prisión funcionarios y presos la practiquen fomentando aunque sólo sea un poco los sentimientos de empatía, compasión en un lugar tan cargado de energía negativa es poco menos que una hazaña. Una hazaña que ayudan a no tener demasiado en cuenta los tics ególatras de la MT. Lynch en este sentido está libre de toda sospecha. Él no necesita utilizar ningún movimiento para obtener un prestigio que desde hace décadas ya atesora como artista. Es más, su vinculación a la Meditación Trascendental puede suponer una mancha en un director en según qué círculos cinéfilos. Con su obra y su trayectoria Lynch ha roto sin ni siquiera pretenderlo con el tópico de la espiritualidad oriental que se ha alimentado desde Occidente y en el que parece que todo tenga que ser sensiblero o cursi. Al contrario, su arte y sus obras apelan al amor a través de los aspectos más extraños y escabrosos de la vida.


David Lynch, meditación entre tinieblas (I)

David Lynch:"Las ideas son como los peces. Si quieres atrapar al pez pequeño puedes quedarte en la superficie. Pero si quieres atrapar al gran pez tienes que profundizar más. En las profundidades los peces son más poderosos y más puros. Son enormes y abstractos Y son muy preciosos. Busco un tipo de pez que es importante para mí, uno que pueda llevar al cine. Pero hay todo tipo de peces nadando ahí fuera. Hay peces para negocios, peces para deportes. Peces para todo. Todo, cualquier cosa que es algo, surge de un nivel más profundo. Los físicos modernos llaman a ese nivel el Campo Unitario. Cuánto más se expanda tu conciencia -tu atención-, más profundizas hacia la fuente, y mayor es el pez que puedes atrapar. Mis 33 años de práctica de Meditación Trascendental han sido cruciales en mi trabajo en películas, en pintura y en todas las áreas de mi vida"


David Lynch es un artista de contrastes. Por un lado el educado y amable chico americano de clase media y por otro el adolescente inquieto cuyo interior ya albergaba un universo poblado de amenazantes criaturas. Es el director afamado y respetado por la industria de Hollywood y al mismo tiempo el autor que conserva intacta su personalidad. El cineasta que explora el lado más oscuro de la naturaleza humana pero que divulga al mismo tiempo los beneficios de la Meditación Trascendental. El artista que por un lado se muestra fascinado por la estética industrial y por otro por el estilo pop de los años 60. Y lo calificamos de "artista" de forma totalmente premeditada. De manera análoga a los grandes hombres del Renacimiento, Lynch ha utilizado un extenso número de disciplinas artísticas para volcar su creatividad, desde la pintura a la música pasando por la animación, la escultura, el cómic o la fotografía. Y no son meras incursiones anecdóticas; en cada una de ellas ha profundizado al máximo para poder expresar su particular universo. Fruto de esta entrega y de esta naturaleza interdisciplinar todos los elementos de sus películas están cuidados hasta el más mínimo detalle. Cuestiones como por ejemplo la textura del sonido y de la imagen, el tratamiento del color, el ritmo del diálogo o la composición del plano forman parte de una idea conjunta, de un proyecto global en el que ningún elemento es secundario.

"La gente me pregunta por qué -si la meditación es tan grande y te da tanta felicidad-
mis películas son tan oscuras y hay tanta violencia? Hay muchas, muchas cosas oscuras flotando en este mundo ahora y la mayoría de las películas reflejan el mundo en el que vivimos. Son historias. Las historias siempre deben tener conflicto. Van a tener altos y bajos, y bueno y malo."

Perturbadora y preciosa escena de Mullholand Drive, su penúltima película:



Lynch, fuertemente influenciado por el surrealismo, ha querido siempre que sus películas apelen a la parte emocional y sean una experiencia en la que conceptos como tiempo y espacio, realidad y fantasía se entremezclen hasta que sea imposible diferenciarlas . Al igual que la filosofía Zen, considera que la palabra, la conciencia racional y analítica no es suficiente para expresar el mundo. Los críticos suelen asociar su obra al mundo de los sueños y la pesadilla, lo cual, sin ser falso, no es del todo cierto. Tal y cómo ha explicado "las ensoñaciones, los sueños cuando se está despierto, son los verdaderamente importantes, los que vienen cuando estoy tranquilamente sentado en una silla dejando vagar mi pensamiento. Cuando duermes no controlas tus sueños. Me gusta sumergirme en un mundo onírico que yo he construido o descubierto; un mundo que yo elijo". A pesar de toda la rabia y toda la violencia siempre guarda un lugar para el amor en sus películas. Son creaciones de la mente, abstracciones, que salvan a los personajes. Sucede en Eraserhead con la mujer del radiador, en Wild at Heart con la Bruja Buena, en El Hombre Elefante con el grupo de freaks y  en Twin Peaks: Fire walk with Me, cuando la difunta Laura Palmer tiene una visión de un ángel.

lunes, 12 de diciembre de 2011

Beastie Boys: Dharma y hip hop (II)

Bodhisattva Bow viene precedido por un tema instrumental titulado Shambala -este nombre hace referencia a un reino mitológico ubicado escondido entre las cimas del Himalaya- y con el que forma de hecho una unidad temática y sonora. Shambala da inicio con un sampler que registra canto de unos monjes budistas, un fondo sonoro sobre el que se van añadiendo el resto de instrumentos, con unos bongos y unas guitarras con un efecto de wah-wah que le dan un aire retro y funky. A continuación, sin ninguna pausa o corte, viene Bohisattva Bow. Con ella los Beastie Boys logran algo francamente complicado: fusionar su sonido característico (rimas y scratching) con sonoridades propias de un monasterio budista. Así, junto al recurso -de nuevo- del canto de los monjes se escuchan trompetas propias de una celebración religiosa e incluso un gong para cerrar la canción. Durante los años de la Contracultura y fruto de la fascinación que despertaba todo lo relacionado con la India multitud de grupos introdujeron sonidos y temáticas orientales a sus canciones. El ejemplo más famoso es el de The Beatles con temas como Love you to y Tomorrow never knows, pero no hay que olvidar tampoco a The Yardbirds, The Kinks o The Grateful Dead y su desbocada psicodelia. No obstante, con Bodhisattva Bow un grupo cuyo sonido no tiene nada que ver  con el movimiento hippy integra sonidos propios de una ceremonia budista a su música. La letra, por su parte, es toda una valiente declaración de principios, y su espíritu está empapado de filosofía budista.


Bodhisattva Bow

As I develop the awakening mind I praise the Buddha as they shine
I bow before you as I travel my path to join your ranks,
I make my full time task
For the sake of all beings I seek
The enlightened mind that I know I'll reap
Respect to Shantiveda and all the others
Who brought down the darma for sisters and brothers
I give thanks for this world as a place to learn
and for this human body that I'm glad to have earned
and my deepest thanks to all sentient beings
for without them there would be no place to learn what I'm seeing
There's nothing here that's not been said before
but I put it down now so I'll be sure
to solidify my own views and I'll be glad if it helps
anyone else out too

El título significa el voto del Bodhissatva. El Bodhissatva es una figura del budismo que hace referencia a aquel ser que desea alcanzar la iluminación o la budeidad pero no para beneficio propio sino para ayudar al resto de seres vivientes a alcanzar el Nirvana. En estos versos dan gracias por haber recibido este cuerpo humano ("I give thanks for this human body that I know I've earned") un tipo de reflexión muy propia del budismo mahayana o tibetano. En este sentido también se hace referencia al dharma (las enseñanzas budistas a través de las cuales se logra la iluminación), al Samsara (el ciclo de nacimientos, muertos y renacimientos) y a Shantideva, un santo y erudito budista que vivió durante el siglo VIII muy venerado por los tibetanos y en cuyos escritos destacó siempre la importancia de vincular la meditación a la acción ya que, según sostiene, la felicidad del ser humano está íntimamente ligada a la de los demás

If others disrespect me or give me flack
I'll stop and think before I react
knowing that they're going through insecure stages
I'll take the opportunity to exersice patience
I'll see it as a chance to help the other person
Nip in the bud before it can worsen
A change for me to be strong and sure
As I think on the Buddhas who have come before
As I pray and respect the good they've done
knowing only love can conquer in every situation
we need other people in order to create
the circumstances for the learning that we're here to generate
situations that bring up our deespest fears
so we can work to release them until they're cleared
therefore, it only makes sense
to thank our enemies despite their intent

En esta parte se citan varias virtudes que el practicante debe contemplar para alcanzar la senda de la iluminación. Así, defiende el principio de la no violencia ("If others disrespect me or give me flack I will stop and think before I react"), la compasión ("Seeing others are as important as myself") y el amor ("knowing only love can conquer hate in every situation"). El hecho de percibir los ataques o la intolerancia de otra persona como una oportunidad para mostrarse generoso es un punto de vista muy característico del budismo.


The Bodhisattva Bow is one of power and strenght
A strenght from within to go to the length
seeing others as important as myself
I strive for a happiness of mental wealth
with the interconnectdeness that we share as one
Every action that we take affects everyone
so in deciding what a situation calls
there is a path for the good of all
I try to make my every action for that highest good
with the altruistic wish to achive Buddahood
so I pledge here before everyone who's listening
to try to make my every action for the good of all beings
for the rest of my limetime and even beyond

En este último tramo se destaca la interconexión que existe entre todos, una idea propia de varias corrientes espirituales. Esta idea comporta un plus de respsonsabilidad a a la hora de emprender una acción. Los últimos versos son un compromiso claro y decidido de hacer el bien. La canción fue escrita por Adam Yaunch, el miembro del grupo más interesado en el budismo, después de acudir a una charla del Dalai Lama. En una entrevista Yaunch explicaba lo que significaba para él el camino del Bodhisattva: "Lo principal del camino de bodhisattva es hacer lo que beneficia a la totalidad del universo" y añadía: "Muchas personas se descuidan de ellas al sentir que tienen que hacer cosas por los demás, todo el rato, incluso cuando no funciona para ellos personalmente. Tienen que incluirse a ellos mismos y saber que estando en la posición más fuerte es como pueden beneficiar a la mayoría del universo".


Actuación de la banda en el Tibetan Freedom Concert:



En 1994 Adam Yaunch cofundó Milarepa Fund, una asociación destinada a distribuir entre los monjes tibetanos los beneficios generados por los derechos de autor de los samplers que aparecían en la canción. Poco a poco Milarepa Fund fue involucrándose en varios proyectos vinculados con la causa tibetana y entre 1996 y 2001 organizó bajo el nombre genérico de Tibetan Freedom Concert una serie de festivales musicales donde colaboraron grupos como Red Hot Chili Peppers, Smashing Pumpkins o Rage Against the Machine. Los festivales fueron un éxito total desde todos los puntos de vista y contribuyeron a dar a conocer la situación de la terrible represión que se vive en el Tibet a manos de China, recaudar fondos e indirectamente difundir valores propios del budismo tibetano.











Beastie Boys: Dharma y hip hop

Con Bodhisattva Bow los Beastie Boys hicieron algo prácticamente inédito. Un grupo totalmente alejado de la psicodelia y del movimiento hippy, vinculado a la cultura urbana de Brooklyn, al hip hop y al hardcore fusionaba su música con sonidos propios de una ceremonia budista. La letra, por su parte, es toda una valiente declaración de principios, y su espíritu está empapado de filosofía tibetana.


 En 1994 los Beastie Boys publicaron su cuarto disco en estudio, el extraordinario Ill Communication. Aclamado por público y crítica, sus 20 cortes dieron como resultado un excitante cocktail donde volcaron todas sus inflencias musicales: funky, latin-acid-jazz, hip hop y hardcore. Entre temas dedicados a series policíacas de los años 70, rimas chulescas y estampas del New York más callejero destacaba una curiosa sorpresa titulada Bodhisattva Bow, una canción de evidente inspiración budista. El tema, precedido por un corte instrumental (Shambala), es una atrevida apología de los principios budistas con referencias explícitas a conceptos como el Dharma o el Samsara. Bodhissatva Bow supuso la prueba irrefutable que el grupo había dejado atrás definitivamente las canciones sobre juergas y alcohol, los himnos machistas y los incidentes violentos.

 
Los Beastie Boys se formaron en 1979 en el neoyorquino barrio de Brooklyn y tras varios cambios en su formación se consolidaron como un trío de hardcore compuesto por Mike D (Michael Diamond), MCA (Adam Yauch) y Ad-Rock (Adam Horovitz). Poco a poco el grupo fue haciendo una transición hacia el hip hop y, tras publicar varios EP's y singles, en 1986 sacaron al mercado su primer álbum titulado Licendes to Ill, un disco que logró un arrollador éxito de ventas. De esta manera, tres insolentes niñatos blancos de Brooklyn lograron reventar la lista de ventas con un disco de hip hop -un género que hasta ese momento pertenecía exclusivamente a los afroamericanos- y con su primer single, el famoso You gotta fight for your right to party (Tienes que luchar por tus derechos para ir de fiesta) como carta de presentación. Con el grupo disfrutando de una popularidad y un éxito del todo inesperados se fueron sucediendo todo un reguero de polémicas: strippers bailando enjauladas en sus actuaciones, arrestos y disturbios.

El videoclip de la gamberra e irresistible Fight for your rights to party. Las alusiones a la compasión y a la tradición budista eran entonces impensables:



 En los siguientes años publicaron Paul's Boutique (1988) y Check your head (1992), dos obras con las que enriquecieron su sonido y se acercaron a diferentes géneros, dando mayor personalidad y solidez a su apuesta. Paralelamente los tres miembros fueron demostrando a través de entrevistas y letras una mayor madurez hasta llegar a Ill communication, donde además de difundir a su manera un mensaje de paz y amor no dudaron en pedir más respeto por la mujer. Aunque la banda ha ido espaciando cada vez más sus publicaciones y sus giras aún continúan en activo y, recopilaciones y ep's al margen, han publicado desde entonces tres álbumes: Hello Nasty, To the 5 burough's y The Mix-Up. Vista toda su discografía en perspectiva,  los Beastie Boys son sin duda alguna una institución dentro no sólo del hip hop sino de la música popular de esta época.

martes, 6 de diciembre de 2011

"El secreto" es que todo era marketing

En 1996 se publicó El Secreto, un libro que se convirtió en un best seller y supuso la culminación de la ley de la atracción, una teoría que se inspira en parte en filosofías y creeencias orientales pero que en el fondo apela al ego y a sus deseos. Nadie se ha hecho más rico ni famoso con el Secreto. Bueno, sí, alguien: su autora.




Desde los años 70 numerosos estudios han puesto de manifiesto los abundantes e interesantísmos paralelismos entre la física moderna y los principios del misticismo oriental. Esto ha sido aprovechado por algunos autores y gurús relacionados con la autoayuda y la New Age para simplificar y tergiversar algunos de estos hallazgos y empaquetarlos en forma de cedés, libros y deuvedés. “El poder está dentro de ti. Con tu mente puedes conseguir todo lo que te propongas”. Esta idea ha encontrado su máxima expresión con la denominada ley de la atracción. Con ella, algunos autores recurren a términos más o menos científicos para dar a sus libros y charlas una pátina de rigor y seriedad, pero si se apartan las palabras más o menos técnicas lo que queda en realidad es una idea que no difiere mucho de las pócimas mágicas que se vendían hace siglos de pueblo en pueblo. Según esta ley, si uno concentra su mente en algo o alguien que desea como el que por ejemplo repasa mentalmente la lista de la compra puede literalmente conseguirlo. Da igual que sea un coche, una relación o una entrada a un concierto; si te concentras de verdad será tuyo. Y en el caso de una persona da igual que ella quiera o no estar contigo, lo que cuenta es tu propio deseo. La ley de la atracción ha venido apareciendo desde hacía años en programas, cursos y webs de automotivación pero gracias a El Secreto logró un renovado impulso. Publicado en 2006, El Secreto es un deuvedé y libro en el que su autora Rhonda Byrne recopilaba reflexiones de varios pensadores inspiracionales, algunas de ellas ciertamente sugerentes y valiosas. La obra logró un éxito arrollador en todo el mundo y se convirtió en el best seller de moda. Acerca de él la activista y escritora Barbara Ehrenreich comenta que “en el deuvedé se ve a una mujer admirando un collar en el escaparate de una tienda, y a continuación aparece con él al cuello, sin más que haber hecho un esfuerzo consciente para atraerlo. En el libro, Byrne, que se pasó años luchando con sus problemas afirma que la comida no es lo que engorda. Luego cuenta la historia de una mujer que “atrajo” a su media naranja fingiendo que ya la tenía: dejó un hueco en el garaje para su coche y vació la mitad de ropa para los armarios para hacerle sitio a él... y voila, encontró a un hombre”.En una entrevista Byrne dió muestras de una patética desfachatez cuando refiriéndose a las víctimas del tsunami 2006 dijo que esos desastres suceden “los que están en la misma frecuencia que el evento” .

La creeencia en una mente ubicua y todopoderosa está presente en muchas tradiciones orientales, y proviene directamente de la idea de la disolución del ego y de la impermanecia de los fenómenos y las cosas. El hecho de comprender que uno no está separado del mundo lo convierte automáticamente en partícipe del universo. Es una idea preciosa: creer es crear que está muy bien como punto de partida y que potencia las compasión, la confianza y las capacidades de las personas. No obstante, con la ley de la atracción y teorías similares se ha pervertido hasta dar un giro de 180 grados y ponerse precisamente al servicio de los anhelos y deseos del ego, siempre ansioso por buscar una ilusión de estabilidad a través de los bienes materiales y de la imagen exterior que se proyecta. Y ahora, quince años después de su publicación, Byrne es multimillonaria y los que la creyeran tienen el mismo dinero menos lo que le costó el ejemplar o los ejemplares de El Secreto (la autora animaba a regalar el libro a familiares y conocidos).

lunes, 28 de noviembre de 2011

Hicks. Iluminación, drogas y rock and roll (II)



Hicks nació en 1962 en el estado sureño de Georgia, en el seno de una familia conservadora y profundamente religiosa. De joven fue algo parecido a un niño prodigio de la comedia, actuando en clubs y bares bastante antes de alcanzar la mayoría de edad. Su material y su puesta en escena estaban inspirados en totems de la comedia como Woody Allen y Richard Pryor y las bromas se centraban sobretodo en su famlia y en la escuela. Hicks se mostró siempre muy interesado en la meditación trascendental y la espiritualidad oriental. Esto, junto a sus primeras experiencias con el L.S.D y los hongos alucinógenos propiciaron una apertura de conciencia que dio un empujón a su trabajo. Hicks acompañó el consumo de esta clase de alucinógenos de otro tipo de sustancias como cocaína, alcohol o mefantemina. Este estilo de vida desenfrenado y salvaje benefició durante un tiempo a su comedia. Era un torbellino encima del escenario y además enfoques inéditos y ocurrencias inesperadas enriquecieron su material. Pero tres años consecutivos de excesos -”siempre que me desfaso pienso que Keith Richards sigue vivo”, solía decir- acabaron pasando factura y al final ya no se trataba de ver hasta dónde llevaba al público con su comedia sino cuanto era capaz de beber.

Finalmente Hicks logró dejar de lado el alcohol y las drogas, excepto los hongos, que seguiria consumiendo puntalmente. El hecho de haber bailado al borde del abismo y haber sobrevivido le aportó una fuerza y una seguridad asombrosas. Hicks fue puliendo su material elaborando un discurso tan trangresor como coherente en el que conectaba libertad de expresión, sexo, rock and roll, política, filosofía y religión. En lugar de seguir el ejemplo de muchas personas que se habían desintoxicado siguió defendió el consumo drogas como una cuestión de elección personal. En uno de sus monólogos dice: “Si no creéis que las drogas han hecho cosas buenas por nosotros hacedme un favor: Id a casa, coged todos vuestros cd's y vuestros discos y quemadlos porque ¿sabéis como iban esos artistas que han enriquecido nuestras vidas? Rrrealmente pasados. Los Beatles iban tan pasados que dejaron a Ringo cantar una canción”. Una forma de denunciar la hipocresía de la clase media americana que vibra con la música de los Beatles o los Stones y después condena sin matices el consumo de drogas.

En este extracto de una actuación en la que reivindica de forma salvaje a los artistas que tocan con el corazón, con el alma, de verdad: “Play from the fuckin heart!”, grita fuera de sí, en contraposición a los pulcros e inofensivos News Kids on the Block, un grupo muy popular por entonces. Aquí demuestra además toda su capacidad para dar colorido y profundidad a sus actuaciones, adoptando diferentes papeles, gesticulando y utilizando el micrófono para crear efectos sonoros.




Pero justo cuando la carrera de Hicks comenzaba a recoger los frutos de años de agotadoras e interminables giras en todo tipo de clubs le diagnoticaron un cáncer de páncreas. Con solo 32 años el destino le hacía la peor de las jugadas. El cómico, no obstante, continúo actuando y, sin dejar de lado el humor, se convirtió en una especie de agitador social capaz de ofrecer ideas y reflexiones que ponían en entredicho los tabúes y convicciones más sagrados de la sociedad. En uno de sus últimos monólogos le explicaba al público:
"Si tenéis hijos -doy por hecho que alguno de vosotros los tenéis- siento deciros esto pero no son importantes. Sé que pensáis que lo son pero no lo son. ¿Sabéis que cada vez que un tío se corre expulsa 200 millones de  espermatozoides? ¿Sabéis lo que signifca eso?, ¡¿uno de entre 200 millones?! He borrado civilizaciones enteras de mi pecho con un calcetín gris de deporte" ¿Era por lo tanto una especie de misántropo sin corazón? Obviamente no. Hicks, cuya visión de la vida tenía abundantes puntos en común con el hinduismo y el budismo , creía en la existencia de una conciencia colectiva y denunciaba aquí cierto tipo de amor que se profesa por los hijos en la sociedad occidental. Un supuesto amor que no deja de ser en realidad la proyección de un sentimiento egocéntrico y obcecado en uno mismo. Con esta reflexión el cómico conduce a la audiencia a un terreno incómodo pero sugerente al mismo tiempo.  Es un monólogo provocador e ingenioso -la frase "He borrado civilizaciones enteras de mi pecho" es tan inmortal como el mejor de los versos de Oscar Wilde- que ofrece a la vez una profunda reflexión de ecos filosóficos.

Y cerramos con unas palabras que mostraban cuál era más allá de la rabia y el cinismo la base de su pensamiento, la naturaleza de su mensaje. Un mensaje basado en la compasión y el amor al prójimo.


sábado, 26 de noviembre de 2011

Hicks. Iluminación, drogas y rock and roll (I)


“Buenas tardes, hermanas y hermanos, amigos y vecinos, vibraciones en la mente del único y verdadero Dios, cuyo nombre es amor”



Bill Hicks es un personaje irrepetible en el mundo de la comedia norteramericana. En él convergían espiritualidad oriental, conciencia izquierdista, amor por el rock and roll y defensa a toda costa de la libertad individual frente al poder y las instituciones. Dotado de un talento descomunal se propuso utilizar su comedia -y era una comedia rematadamente buena- para iluminar el inconsciente colectivo, dinamitar tabúes y poner el descubierto la hipocresía de la sociedad norteamerica de la occidental por extensión. A pesar de que solía bromear con un salto en la evolución humana cuando el hombre perdiera una vértebra y lograra por fin practicarse una felación a sí mismo, creía de verdad en una revolución, un cambio de conciencia con el que triunfaran definitivamente el amor y la verdad. Representaba en cierta forma una actualización de la ideología hippy y contacultural de los años 60 pero alejado del amaneramiento y los tópicos propios del flower power y la new age. De hecho en algunos de sus monólogos proclamaba: “Estoy harto de esa falsa moralidad santurrona de mierda sobre la vida. ´¿No es bonita la vida? ¡Démonos palmaditas en la espalda!´ ¡Iros a la mierda!”.

Vestido habitualmente de riguroso negro y con una lengua afilada y mordaz, en sus actuaciones trataba temas espinosos o tabúes  desde las drogas y la pornografía hasta el aborto, la política exterior de los EE.UU o el tabaco, y solía aportar siempre un enfoque inédito respecto al aceptado por el establishment. Sobre el intento fallido de asesinato del presidente Rondal Reagan reflexionaba: “Vivimos en un mundo donde los buenos mueren y los mediocres sobreviven. Ghandi, asesinado. Martin Luther King, asesinado. Jesucristo, asesinado. Ronald Reagan, herido. Ocho cánceres y ese cabrón aún camina.” Y sobre el papa: “Me encanta ver al Papa en su Papamovil protegido por un cristal, su cristal antibalas de metro y medio de ancho. ¡Ésa es la fe en acción amigos! Tiene a Dios de su parte!.

En este formidable monólogo, ofrecido poco después de la Primera Guerra del Golfo, denuncia las mentiras y exageraciones que difundieron los mass media para justificar un ataque indiscriminado y desigual. Y continúa con una reflexión interesante: “Era increíble ver volar esos misiles por el aire pero ¿no podríamos utilizar esa tecnología para disparar comida a la gente hambrienta?”


De una forma análoga a Noam Chomsky, el cual inspiró muchas de los monólogos ofrecidos en los últimos años de su carrera, consideraba que el mundo estaba controlado por unas pocas corporaciones que a través de la política, los mass media y el marketing habían logrado imponer una cultura capitalista deshumanizada y carente del más mínimo escrúpulo.

Este es un extracto de un monólgo dedicado al mundo del marketing:



Y acerca de Bush dijo: “La razón por la que no voté por Bush es porque es un asesino de masas. Hay otras razones para votar aparte de la cartera. Yo puedo pagar 5 centavos de más por el litro de gasolina solo para saber que unos pequeños niños morenos no están siendo apaleados como focas para que Pepsi pueda construir otra planta en Nicaragua”:


miércoles, 23 de noviembre de 2011

Alan Watts y la abstracción del dinero

El genial Alan Watts nos ilumina acerca de la naturaleza del dinero con unas palabras pronunciadas hace más de 30 años en una conferencia  y que frente a la convulsa situación económica que vivimos están más vigentes que nunca.



El famoso pensador inglés Alan Watts dijo en una conferencia:
"En muchas de las diferentes dimensiones de la vida vivimos un estado confusión total entre símbolo y realidad. [...] Recuerden la gran depresión; un día todo el mundo hacía negocios, las cosas estaban bastante bien y al día siguiente habían colas para hacer pan. Era como si alguien hubiera ido al trabajo y al llegar le hubieran dicho `Lo sentimos amigo, pero hoy no se puede seguir construyendo. Ninguna construcción puede seguir, no disponemos de los suficientes centímetros´ Y el trabajador diría: ¡¿Qué quiere decir que no disponemos de los suficientes centímetros?! Tenemos madera, ¿no es así? Tenemos metal, incluso tenemos cinta métrica' Le habrían respondido: "`Sí, pero es que usted no entiende el mundo de los negocios. Lo que ocurre es que no disponemos de suficientes centímetros, hemos utilizado demasiados' Por absurdo que pueda parecer, eso es exactamante lo que sucedió en la Depresión, porque el dinero es algo del mismo orden real que los centímetros, gramos, metros, kilos o líneas de latitud y longitud. Es una abstracción. Es un método de contabilidad para obviar el incómodo procedimiento del trueque. Pero nuestra cultura, en realidad toda nuestra civilización, está completamente colgada de la noción de que el dinero cuenta con una realidad propia independiente".




Esta reflexión de Watts, hecha hace ya más de 30 años, cobra más sentido que nunca con la actual crisis mundial y pone de manifiesto la asombrosa lucidez y perspicacia de su pensamiento. Si algo caracteriza esta crisis económica es su naturaleza abstracta, etéra, indefinida. Todas las noticias hablan de rumores, bonos basura, primas de riesgo y acciones que fluctúan. Meros números que parpadean en una pantalla de ordenador. El hombre efectivamente creó el dinero para facilitar el intercambio comercial pero poco a poco, impulsada por la propia lógica insaciable del capitalismo, el dinero ha ido dominando al hombre hasta desembocar en la situación que vivimos hoy en día. Una situación entre absurda y dramática. ¿Cómo explicar sino que miles de personas honradas deban vivir en la calle mientras abundan los pisos vacíos? En teoría un selecto grupo de hombres malvados y sin remordimientos controlan el mundo desde las sombras. Pero esto sólo es verdad en parte. Ellos también son esclavos del sistema y de la noción del dinero; nunca tienen suficiente. Ya no se trata de comprar más casas, más aviones, más lujos, sino de amasar dinero. Un dinero que ni siquiera se transforma en papel, sólo es un número en una cuenta. Son adictos al subidón de adrenalina que experimentan cada vez que multiplican sus beneficios pero, de manera parecida a un cocainómano o  a un ludópata -de hecho en estos casos se activan las mismas áreas del cerebro vinculada a las adicciones- no tardará en necesitar más acción. La prueba incontestable de que ellos también son esclavos del sistema es que con su actitud voraz e irracional están poniendo en serio peligro las bases y reglas que les permiten a ellos vivir como unos auténticos privilegiados.  El sistema tiene vida propia, no hay ninguna persona al frente. Como un tren de alta velocidad que descontrolado se aproxima al abismo y sin ningún conductor a los mandos.